El Ejército de Tierra está trabajando dentro del proyecto Fuerza 35 en el impulso de ciertas capacidades que considera claves para avanzar en el diseño de las futuras brigadas de combate como el mando y control, la munición discriminatoria, los sistemas aéreos remotamente tripulados (RPAS), junto con los sistemas antidrón (C-RPAS), y los vehículos terrestres no tripulados (UGV).